"Qué alegría, vivir sintiéndose vivido. Rendirse a la gran certidumbre, oscuramente, de que otro ser, fuera de mí, muy lejos, me está viviendo. Que hay otro ser por el que miro el mundo porque me está queriendo con sus ojos. Que hay otra voz con la que digo cosas no sospechadas por mi gran silencio; y es que también me quiere con su voz.
Y todo enajenado podrá el cuerpo descansar quieto, muerto ya. Morirse en la alta confianza de que este vivir mío no era sólo mi vivir: era el nuestro. Y que me vive otro ser por detrás de la no muerte."
(La voz a ti debida - Pedro Salinas)

PERIODISTA

EN EL CAMPO PERIODISTICO


Fue corresponsal del Diario de Yucatán en Villa de Guadalupe, Champotón.

Asesor Fundador del “Club de Periodismo” de Felipe Carrillo Puerto, Carmen, Camp.

Asesor Fundador del Periódico “El amanecer” del Club de Priodismo de Felipe Carrillo Puerto, Carmen, Camp.

Corresponsal del Diario de Yucatán en Alfredo V. Bonfil, Camp.

Corresponsal, editorialista y columnista de Tribuna de 1978 a junio de 1980.

Corrector de estilo de Tribuna, de julio a diciembre de 1980

Jefe de Corresponsales y Redactor de Tribuna, de 1981 a 1983

Jefe de Redacción de Tribuna y Tribuna de la tarde de 1984 a 1986

Director de Tribuna de la Tarde y Subdirector de Tribuna de 1986 al 2000.

Director de la Asociación Regional de Periodistas y Escritores, A.C.

Autor de la de la Columna Política EXPEDIENTE de 1981 al 2000, donde hizo uso de su don como columnista, crítico y escritor, siendo el parte aguas de una historia en la que recorcholis y zambomba son solo algunas de las frases simpáticas que daban a su muy particular forma de escribir una característica muy personal sin hacer a un lado la elegancia y la propiedad en el estilo, poniendo en practica y por completo el artículo 19 de la Declaración Universal de los Derechos Humanos, siendo en muchas ocasiones del desagrado de muchos políticos y funcionarios, llegando a ser amenazado de muerte frente a su propia familia.

Gracias a su columna llego a tener muy contados amigos e incontables enemigos, decir la verdad no siempre es bien visto, y menos si la haces saber a todo el pueblo como lo hizo el. La edición dominical del periódico TRIBUNA se agotaba ante el deseo de cientos de campechanos de compartir con el profesor esa mirada única de nuestra realidad, como solo un verdadero y auténtico periodista lo debe hacer.